APURADOS, EL TSJ CÓRDOBA QUIERE APROBAR LA 'GUÍA DEL ABORTO NO PUNIBLE'
Según informó La Voz del Interior a instancias del Tribunal Superior de Justicia de Córdoba (TSJ), rechazó las recusaciones que la asociación Portal de Belén había planteado contra varios vocales, que ahora deberán resolver sobre la constitucionalidad de la guía para la práctica del aborto no punible en esta provincia. Se avisora el resultado.
Conforme la extraña comunicación que se hizo pública en los medios sociales y fue señalado por el Portal de Belén como un intento por llevar el tema al terreno mediático, el Tribunal Superior rechazó (como generalmente lo hace) las recusaciones planteadas en contra de varios miembros del mismo.
Parece que el TSJ también 'instó' a las partes a que eviten dilaciones y “manifestaciones litigiosas deformadas”, teniendo en cuenta la expectativa social por una decisión que ha de gravitar en “derechos de la más alta jerarquía constitucional y convencional”; lo que seguramente va dirigido específicamente a la ONG el Portal de Belén, para dar un 'mensaje' público a las organizaciones aborteras y así lograr cumplir sin trabas con los compromisos e intereses que pretenden la 'legalización' de una 'guía' claramente inconstitucional, oportunamente dictada por la Corte Suprema de Justicia de la Nación.
El Secretario Relator José Pérez Corti -de buen manejo mediático- habría declarado a La Voz del Interior que “El TSJ tiene la voluntad de pronunciarse sobre el tema lo más rápido posible. Es un caso con mucha importancia social. La gente está esperando esta decisión”.
No caben dudas que la resolución debe dictarse antes de la cumbre 'G-20' y puede aventurarse una decisión favorable a la legalización encubierta del aborto, por vía de la aplicación de una resolución judicial (de la Corte) que en forma inconstitucional e ilícita, reformó el Código Penal.
El Portal de Belén emitió una crítica clara a la forma en que se hizo pública la resolución de rechazo de las recusaciones, basado en “la decisión del TSJ de llevar al terreno mediático decisiones tomadas en el curso de una causa judicial”.
Es claro que tiene razón la mencionada ONG, al decir que la aprobación de tal 'guía para abortos no punibles', “implicaría llevar adelante abortos con la sola firma de una declaración jurada de la persona que quiere abortar sin mencionar ninguna circunstancia, declaración jurada que queda en poder del profesional actuante y no se incorpora en la historia clínica”... “Implica un absoluto desconocimiento del derecho a la vida de un niño por nacer”, dijo Rodrigo Agrelo, abogado de la ONG, en diálogo con el mencionado diario.
Sobre la recusación presentada, el abogado habría indicado que el TSJ pretende integrar las tres vacantes con magistrados que no corresponden porque no se ha seguido el orden de prelación del listado de la acordada firmada por los jueces. “La acordada tiene un orden de prelación, porque el riesgo es que se puedan generar tribunales ‘a la carta’”, habría expresado Agrelo. Por nuestra experiencia, esa es la forma de actuar permanente del TSJ en todos los casos en que se tienen decisiones ya tomadas (en este caso, la aprobación de la 'guía'.
Supuestamente Pérez Corti habría ensayado una justificación diciendo que la selección de los jueces se habría realizado en atención a cuestiones (que no están previstas en la ley provincial de reemplazos), como la 'especialidad de cada juez' y 'representantes de cada fuero' (por lo que debería ser civil, comercial, laboral, contencioso administrativo). Se puede avisorar, al menos, que se designó al Dr. Víctor María Vélez, integrante de la Comisión Redactora del proyecto de reforma del Código Penal -presidida por Mariano Borinsky (quien -en acto de sumisión incomprensible- presentó el proyecto ante el Dpto. de Estado de EEUU [según Infobae del 14/11/2018], promotor declarado de la despenalización), por la que se pretende legalizar el aborto.
El Secretario no dio precisiones -aparentemente- sobre cuándo podría estar la decisión final sobre el tema de fondo de esta causa, ya que no descartó que las partes pueden interponer otros recursos que sigan dilatando esa resolución. Todos sabemos que será, como dijimos, antes de la mencionada cumbre internacional.
Agrelo habría asegurado: “Vamos a usar todas las herramientas que nos da el Código de Procedimiento para defender a los niños por nacer y para que la integración del TSJ sea acorde con las normativas vigentes”.
Pérez Corti recordó que en este expediente no está en discusión el derecho a la vida, sino la aplicación de una guía redactada por el Ministerio de Salud de Córdoba. Los efectos son exactamente iguales: legalizar el asesinato de niños por nacer.
Nuestra Opinión
Queremos poner de resalto dos cuestiones;
Primero, la vocación estatal -sumisa y entreguista- de imponer la ideología de Género a la sociedad argentina y, en este caso, especialmente a la cordobesa.
En segundo término, cuestión que pasa desapercibida para la mayoría de los cordobeses (por vocación, respetuosos e ingenuamente crédulos de la jerarquía judicial) que este TSJ ha demostrado tener muy poco respeto por las leyes, cuando se trata de cumplir con los designios de las logias a las cuales pertenecen. Ello se advierte hasta en pequeñas e insignificantes causas. La opinión del pueblo, como pasa con todos los políticos de la Argentina, muy poco les interesa. El manejo y la adhesión de los dueños de los grandes medios periodísticos, contribuyen a transformar la realidad acomodándola a esos mismos intereses. Por lo que lo que se trata, es de someter a la Argentina, cambiando especialmente el origen y la tradición moral de los argentinos.
Tiene inmensa importancia no olvidar que un magistrado cordobés vinculado ideológicamente a esta secta secreta (Víctor María Vélez), significa un claro mensaje en este sentido. Con 31 años en la Justicia cordobesa, tenemos conocimientos sobrados al respecto.
Los que estamos a favor de la vida, nos sentimos claramente decepcionados de nuestras autoridades, pero pocos advierten que actúan con sutileza e hipocrecía creciente, es decir, mienten y apelan a todos los medios para 'quedar bien' ante la opinión pública, a la que no se cansan de engañar y tomarla de tontos.
