Facebook usa web financiada por George Soros para censurar campaña contra el aborto
La red social Facebook usa una web financiada por la Fundación Open Society de George Soros como verificador de información para censurar la campaña “La ONU quiere IMPONER ABORTO… con la excusa del coronavirus” de CitizenGO, que ya ha reunido más de medio millón de firmas.
Fuente: POR DAVID RAMOS para ACIPRENSA
Al compartir la campaña de CitizenGO, Facebook inserta sobre el enlace el mensaje “Información falsa. Comprobado por verificadores de información independientes”, remitiendo a un artículo del sitio web colombiano “La Silla Vacía”, que surgió gracias a capital de George Soros, conocido promotor del aborto a nivel mundial.
Entre los argumentos que usa el sitio web colombiano para calificar de “falsa” la campaña de CitizenGO se lee que “en primer lugar, la salud sexual y reproductiva no significa aborto”, aunque líneas después admite que “los servicios de salud sexual y reproductiva, que como contamos en este detector, incluyen los métodos anticonceptivos; los procedimientos de reproducción asistida; el control y seguimiento del embarazo; la práctica de abortos (sean seguros, espontáneos o por pérdida fetal tardía); y los cuidados posparto y posaborto”.
Además, para la web financiada por Soros usada por Facebook como verificadora de información “en ningún momento la ONU está imponiendo el aborto; de hecho, no tiene la competencia para ello. Lo que se busca es que los países avancen en la garantía de estos derechos”.
Al relatar su creación, La Silla Vacía recuerda que “nació con una donación del Open Society Foundation” en 2009. Más adelante, el sitio web señala que para 2019 el 9.5% de sus ingresos provinieron de la fundación de Soros.
Además, el sitio web colombiano estima que el 25.7% de sus recursos “vinieron de Facebook en el marco de una alianza para llevar nuestro detector de mentiras a esta red social como parte de su programa de verificación de datos externos”.
George Soros y el aborto
La Fundación Open Society, creada por Soros en 1993, financia diversas campañas a favor del aborto en todo el mundo.
En 2016 se conoció que la fundación de Soros movió 1.5 millones de dólares para callar el escándalo de la multinacional del aborto Planned Parenthood, acusada de vender órganos y tejidos de bebés abortados en sus instalaciones.
En 2017, el Gobierno de Irlanda ordenó a Amnistía Internacional devolver a Soros los más de 160 mil dólares donados por su Fundación Open Society para una campaña a favor de la legalización del aborto en ese país.
Un documento de la Fundación Open Society filtrado por DCLeaks.com en 2016 reveló que para la organización de Soros era importante “una victoria” a favor del aborto en Irlanda para “impactar a otros países fuertemente católicos en Europa”.
La revista de economía Forbes calcula la riqueza de George Soros en 8.3 mil millones de dólares.
La campaña de CitizenGO y el aborto promovido por la ONU
En diálogo con ACI Prensa, Luis Losada Pescador, director de campañas de CitizenGO, explicó que “la realidad es que la 53º sesión de la Comisión de Población y Desarrollo de Naciones Unidas presentó un borrador de resolución en la que los estados se comprometían a garantizar los derechos sexuales y reproductivos en el 2030. Y eso significa cuidados prenatales, anticoncepción y aborto”.
“Y sabemos por fuentes internas que la mesa de la Comisión de Población y Desarrollo mantuvo reuniones bilaterales con los estados que no querían suscribir ese texto para tratar de convencerlos. Es decir, hubo presión o imposición o como queramos llamarlo”.
Losada Pescador lamentó que a pesar de que informaron a La Silla Vacía “de todo esto y de alguna información que desconocían y lejos de agradecérnoslo, siguieron manteniendo la censura”.
El Director de Campañas de CitizenGO señaló que si bien “las redes sociales son un espacio de libertad, pero su sesgo ideológico y la censura suponen un retroceso en la libertad de expresión”.
Para sumarse a la campaña “La ONU quiere IMPONER ABORTO… con la excusa del coronavirus”, puede ingresar AQUÍ.
Fuente: POR DAVID RAMOS para ACIPRENSA