El Papa crea comisión para transferir fondos de Secretaría de Estado al APSA
La Secretaría de Estado no gestionará más los fondos y todas las inversiones deben pasar a la Administración del Patrimonio de la Sede Apostólica (APSA) con la posibilidad de cerrar además la oficina administrativa en la Secretaría de Estado.
Fuente: ACIPRENSA
La noticia, que estaba en el aire, se ha hecho oficial hoy después de una reunión presidida por el Papa Francisco, que ha definido que esta transición debe realizarse a través de una Comisión de Paso y Control que entra en función por tres meses.
La decisión del Papa ya había sido tomada y fue comunicada en una carta el pasado 25 de agosto al Cardenal Pietro Parolin, secretario de Estado del Vaticano. Por una parte está la voluntad de conseguir una gestión centralizada de las inversiones, para poder ejercitar un mejor control. Por la otra, sorprende cómo afecta esta disposición a la Secretaría de Estado, que se encuentra en el ojo del huracán por la compra de un edificio de lujo en Londres que posteriormente derivó en una investigación interna y cinco suspensiones. Pero no afecta, al menos por ahora, al Governatorato del Vaticano, la Congregación para la Evangelización de los pueblos, que tienen autonomía en el presupuesto, propiedades y posibilidad de invertir o también a entes con autonomía presupuestaria como es el tribunal vaticano.
La carta del Papa Francisco subraya que “la secretaría de Estado es sin lugar a duda el dicasterio que sostiene más de cerca y directamente la acción del Santo Padre en su misión”, pero “no parece necesario ni oportuno que la Secretaría de Estado deba realizar todas las funciones que ya son atribuidas a otros dicasterios” y por lo tanto “es preferible que se aplique también el principio de subsidiariedad también en materia económica y financiera”.
Se trata de transferir al APSA “la gestión y la administración de todos los fondos financiero y del patrimonio inmobiliario” que “mantendrán en cualquier caso la finalidad actual”. Y en este caso la carta refiere concretamente tanto al inmueble de Londres, cuya compra-venta está siendo objeto de una investigación vaticana, como del fondo Centurion, gestionado para la Secretaría de Estado por Enrico Crasso, de los que “es necesario salir lo antes posible, o al menos, disponer para eliminar todos los riesgos reputacionales”. Un detalle que sorprende porque en el fondo la restructuración de la operación de Londres nació justo de la idea de proteger la inversión y de eliminar los riesgos reputacionales.
El Papa pide también que “todos los fondos hasta ahora administrados por la Secretaría de Estado sean incorporados en el balance consolidado de la Santa Sede”, mientras que la Secretaría de Estado entrará en las reglas generales de todos los dicasterios, con un presupuesto aprobado “salvo para lo que respecta a las materias reservadas y sometidas a secreto que son aprobadas por una comisión designada para ello”.
El Papa Francisco subraya que la Secretaría para la Economía, es la llamada a “implementar el control y la vigilancia financiera sobre todos los entes de la curia romana”, lo que incluye a la Secretaría de Estado, que por lo tanto ”no tendrá ninguna responsabilidad de control y vigilancia en materia económica y financiera sobre ningún ente de la Santa Sede ni de los relacionados”.
El Papa concluye sugeriendo una reunión, que tuvo lugar el 4 de noviembre, presidida por el Pontífice en la que participaron el cardenal Pietro Parolin, Secretario de Estado del Vaticano; el Arzobispo Edgar Peña Parra, sustituto de la Secretaria de Estado; el Obispo Fernando Vergez, secretario general del Governatorato de la Ciudad del Vaticano; el Obispo Nunzio Galantino, presidente del APSA y el P. Juan Antonio Guerrero Alves, prefecto de la Secretaría para la Economía.
En la comisión de paso y control está Mons. Peña Parra, Mons. Galantino y el P. Guerrero. Se trata, por lo tanto, de un paso hacia la centralización de las inversiones que se destinan de este modo a la llamada “banca central” del Vaticano. También para ayudar a este proceso al APSA llegó un nuevo secretario laico, Fabio Gasperini.
Queda por ver si habrá otros órganos vaticanos involucrados en el proceso o si se trata de una medida nacida solo a partir de investigaciones. Sin embargo, la salida de la Secretaría de Estado de los asuntos económicos fue anticipada de manera simbólica cuando por primera vez la Secretaría de Estado no fue incluida en la Comisión de Cardenales del IOR.
Fuente: ACIPRENSA